Un verdadero escándalo sacude al Concejo Deliberante de Guaymallén. El concejal peronista José Pozzoli denunció que una familia humilde, con niños y personas con discapacidad a cargo, podría ser desalojada de un terreno que habría comprado… ¡a otro concejal en ejercicio!

El acusado es nada menos que Miqueas Burgoa, edil del Movimiento Provincial Alfonsinista —el mismo que fue sorprendido manejando en estado de ebriedad en General Alvear—, quien según la documentación incorporada al expediente 14805, habría recibido 80 mil pesos en mano como parte de una operación de venta en condominio en el loteo Gente de Mendoza.

La denunciante, Irma Reynaga Quispe, relató que invirtió todos sus ahorros y préstamos en una pieza precaria para vivir junto a sus hijos, su hermano con retraso mental y sobrinos menores. Hoy, enfrenta el riesgo de ser desalojada porque el terreno figura con otro dueño. “¿Quién me devuelve el dinero que gasté?”, se pregunta la mujer desesperada.

Pozzoli contra Burgoa: “Tenemos un Récord Guiness de corrupción”

El peronista Pozzoli no se guardó nada y fue al hueso:

“Estamos frente a un caso vergonzoso. Vendieron un lote a una mujer humilde, con chicos discapacitados, y hoy la quieren sacar. Hay recibos firmados por el concejal Burgoa. No se hace cargo ni Vivienda ni la Unión Vecinal. Este es el primer caso que debe investigar la Oficina Anticorrupción. El Movimiento Alfonsinista tiene un solo miembro y ya acumula denuncias: es el 100% de su fuerza política denunciada por corrupción. Un Récord Guiness”.

Burgoa contraataca: “Pozzoli es un burro”

Lejos de dar explicaciones, Burgoa eligió contraatacar con insultos y chicanas:

“Pozzoli denuncia todo a viva voz pero no fundamenta nada. Si habla de corrupción, que vaya a la Fiscalía. Es un burro que no sabe cómo funcionan las asociaciones civiles ni la Dirección de Vivienda. Tiene que dejar de hacer shows”.

Y agregó, en tono desafiante:

“Yo no cobré dos sueldos, a diferencia de él que sí estuvo cuestionado. Que deje de ser caradura. Si denuncia corrupción, que vaya a los tribunales”.

Pozzoli redobla la apuesta: “Acá hay recibos firmados”

En la última sesión, Pozzoli volvió a la carga y exhibió la prueba clave:

“No soy yo el que lo dice, es la señora Quispe. Ella afirma que le pagó al concejal Burgoa, que él firmó los recibos, y ahora la desalojan. Acá está el expediente 14805, con toda la documentación. Vamos a hacer las denuncias correspondientes para que esto no quede en la nada. El problema es que esta mujer y sus hijos pueden quedarse en la calle, mientras el concejal que recibió la plata mira para otro lado”.

Un caso que promete escalar

Lo que empezó como un cruce político en el Concejo Deliberante puede terminar en la Justicia. Pozzoli ya anunció que impulsará una denuncia formal, mientras Burgoa lo desafía a “probar en los tribunales” lo que dijo.

Mientras tanto, la señora Quispe y su familia siguen viviendo con la incertidumbre de si perderán el techo que construyeron con sacrificio. En Guaymallén, la pregunta que queda flotando es: ¿puede un concejal vender un terreno en condominio a una familia vulnerable y después desconocer esa operación?